Trump coloca al aparato militar al frente de su cancillería

En el sistema de gobierno estadounidense, el Departamento de Estado es el equivalente a la figura de la Cancillería que existe en la mayoría de las naciones. Se supone que allí debe haber, al menos en apariencia, diplomacia, ayer Donald Trump designó en ese cargo a Mike Pompeo, el director la CIA, sin duda es una decisión que marca el paso definitivo para que el aparato militar imperial sea quien domine, sin intermediario alguno, las políticas de la Casa Blanca.

No se trata de que Rex Tillerson resultara un moderado, todo lo contrario, forma parte del mismo conjunto de intereses del poder económico transnacional y su conducta imperial quedó a la vista durante su ejercicio como Secretario de Estado, sin embargo no era un operador directo del sistema de espionaje, intervención y violencia que se planifica tras las estructuras de la CIA.

Pompeo no sólo es representante del aparato militar, es también un empresario, tal como lo es Tillerson y el propio Trump, reúne las dos condiciones de la casta que secuestró el poder en los Estados Unidos y que coloca en riesgo a la humanidad entera. Quizás por ello en días reciente, el presidente ruso Putin les recordó que no se quedarían inmóviles ante sus amenazas y que tenían también armas de última generación para responder.

En un tuit, Trump precisó de que se trataba todo: «En realidad me llevaba bien con Rex, pero tenía una mentalidad diferente, un pensamiento diferente», mientras con respecto a Pompeo señaló “siempre estamos en la misma onda”. Por ejemplo, Tillerson había expresado desacuerdo en echar por la borda el acuerdo nuclear con Irán.

El desafío militarista

Mike Pompeo es dueño de empresas que se dedican a la fabricación de piezas de aviación y también está ligado a los suministros para las empresas petroleras. Pertecene al Tea Party, el clan racista que representa lo mas atrasado del Partido Republicano, son tal cual, los que se sienten ungidos para dominar el mundo, de hecho se creen sus propietarios. Defienden la libre venta de armas en Estados Unidos y como el propio Pompeo se manifiestan partidarios de la tortura y de mantener abierto el centro de detenciones ilegal de Guantánamo.

Contra Venezuela, contra el mundo

A comienzos de año, Pompeo se manifestó orgulloso de servir desde la CIA a la construcción de informes para intensificar la campaña de acoso y bloqueos contra Venezuela. “El Presidente no estaba satisfecho con la descripción de la situación que le habíamos presentado. Quería más claridad en relación con algunos asuntos financieros, como quién tenía el dinero”, dijo el funcionario.

Además comentó que Trump tenía un especial interés en conocer la relación del régimen de Maduro con las Fuerzas Armadas venezolanas, para así poder tener “una imagen más completa”. Por esos días apareció también Tillerson hablando de su manifiesto apoyo ante un golpe militar que derrocara al gobierno de Nicolás Maduro.

La carnicería

Human Rigth Watch no es precisamente una institución que sea ajena a los servicios e intereses del imperialismo, pero imaginemos la gravedad de lo que significa Pompeo, que no dudaron en cuestionarlo cuando fue propuesto, a inicios del mandato de Trump, para liderar la CIA.

“Las respuestas de Pompeo a preguntas sobre tortura y vigilancia masiva son peligrosamente ambiguas en lo relacionado a si estaría dispuesto a apoyar prácticas abusivas e intentar subvertir las garantías legales existentes”, señaló en su oportunidad María McFarland Sánchez-Moreno, codirectora del programa sobre Estados Unidos de Human Rights Watch. “El hecho de que Pompeo no desapruebe de manera inequívoca la tortura y la vigilancia masiva, sumado a que anteriormente defendió la vigilancia de ciudadanos estadounidenses y apoyó el programa de torturas de la CIA, son motivos suficientes para entender que no debería estar al frente de la CIA”.

 

• Lea también:

Chevige González Marcó

Periodista y analista internacional. Trabajó en La Radio del Sur, Venezolana de Televisión, Radio Nacional de Venezuela y actualmente es parte del equipo editorial del Correo del Orinoco.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.